SE INAUGURÓ LA BIBLIOTECA "DR. ERNESTO MAX AGÃœERO"

A un año y 18 días del fallecimiento del querido y entrañable Prof. Ernesto Max Agüero- docente, investigador y exdecano de la Facultad de Humanidades y Ciencias Sociales (FHyCS)-, se inauguró en la tarde de este viernes la biblioteca especializada en Trabajo Social que lleva su nombre y que dependerá de la Unidad de Investigación “A.S Victoria S. Esquivel”.

La misma cuenta con bibliografía específica de Trabajo Social con 367 libros, incluyendo revistas especializadas. 318 ejemplares y revistas pertenecían al Dr. Agüero y fueron donados y acercados gentilmente por su hermano Luis Max Agüero.

Este espacio al que podrá acercarse toda la comunidad académica, se encuentra ubicado en el 2º piso del anexo de la FHyCS (Otero 257º). Allí, cerca de las 18, se realizó el descubrimiento de una placa en homenaje y reconocimiento a la trayectoria del querido Max Agüero con el acompañamiento de sus familiares que arribaron desde la provincia de Tucumán.

Antes de ello, las autoridades presentes brindaron palabras alusivas en el aula 4. “Agradezco a su hermano Luis y familia, quienes me manifestaron la necesidad de donar los libros nos pusimos inmediatamente de acuerdo. Max dejó más de la mitad de su vida profesional en esta Facultad. A él no le importaba hablar sino ser, todos recordamos su bondad para con todos, su sencillez. Hoy está en la biblioteca que lleva su nombre”, sostuvo emocionada la Prof. Benita Lirompeia Fernández, principal impulsora de la creación de la biblioteca.

Por su parte el vicedecano, Lic. Ignacio Bejarano, destacó “Ernesto marcó un camino y nosotros tenemos el compromiso de seguirlo, partimos desde hoy y no vamos a caer. Agradezco a todos los que trabajaron para armar la biblioteca”.

En tanto que el decano, Dr. César Arrueta, remarcó “dejó un vació en la política, las construcciones bien intencionadas, los proyectos colectivos, eso fue lo que él hizo en nuestra Facultad y en nuestra Universidad, estaba en los pequeños y en los grandes detalles. También se lo extraña en las aulas, no podremos suplir su vacío pero si podremos tener su presencia a través de sus textos que desde hoy tendremos en esta biblioteca”.

Muy emocionado por el reconocimiento, Luis Max Agüero, expresó “estoy muy agradecido, es un bálsamo para el alma, esperando que estas cosas sirvan para la gente, para los estudiantes. En las charlas que yo tenía con mi hermano siempre estaba más preocupado por los alumnos que por otra cosa. Siempre trata de innovar, era un ejemplo".

"A veces viajaba a mi casa y se volvía en el mismo día porque decía que tenía cosas que hacer por los chicos, por la Facultad. Él amaba esto. Cuando se fue me llamaron muchos alumnos, vi tantas cosas en Facebook que me emocioné mucho, es invalorable”.